Si es que hay viajes que son para recordar y conmemorar, quizás este sea uno de los que más. Tanto por lo bueno como por lo malo, todo sea dicho. Porque al final en los viajes no son solo las fotos bonitas y los momentos mejores los que se recuerdan. Y este viaje no iba a ser una excepción. El año pasado tras ganar Zitti e Buoni de Maneskin empezamos a planear nuestro viaje al próximo Eurovisión. Y mira que, aunque lo hicimos con un año de antelación, no se crean que fue fácil.