La Costa Amalfitana (Costiera Amalfitana) será siempre un viaje que nunca olvidaré. Empezando como esos planes improvisados, sin mucho sentido al principio, pero con el tiempo y mucho cariño de Montse, conseguimos organizarlo. No queríamos que los viajes acabaran, aún me siento así, y ojalá este año se hubiera prolongado un poco más. Ruta Roma a la Costa Amalfitana, tras conocer los platós de la RAI, la televisión pública italiana. Ahí estábamos nosotras, cinco chicas, tan diferentes y a la vez tan iguales que se fueron a la aventura italiana.
Como comentamos en nuestro post anterior, en nuestra aventura por Sorrento, nuestra idea era ir a la playa. Vamos, yo llevaba 3 bikinis diferentes. Total, que ni pude utilizar. Aún sigo con la espinilla del sol prometido de mayo y el disfrutar de la costa. Pero no cambiaría este viaje por nada en el mundo. Igual solo una cosa, la compañía de coches, ya que en Italia tienen una manía de aprovecharse de cualquier tontería para cobrarte de más. Y en el alquiler de coches no podían ser menos. A pesar de tenerlo a todo riesgo, buscaron mil escusas para hacernos pagar de más. Pero independientemente, ya habituadas a Roma, no era algo nuevo para nosotras.
Tenga mucho cuidado en Italia, ya que por todo te cobran un plus. Desde el “coperto” que supuestamente es un impuesto (ilegal) que te cobran por llevarte la comida, el pan y el agua (cosa que al final acabas pagando aparte) hasta el impuesto por turismo que es al quedarte un día. En función de cada sitio, te cobran más o menos. Pero dejando a un lado estos detalles, continuemos con el viaje. Fue organizado con más o menos antelación. Ya que queríamos ahorrar al máximo posible. Y en parte, sabíamos que sería de nuestros últimos viajes del Erasmus. Así que había que ponerse manos a la obra.
Alquilamos el coche desde Roma, en el aeropuerto Ciampino. Suele ser más barato alquilar los coches en los aeropuertos, además, para mayores de 25 o 26 años suelen ser más barato. Les recomendamos cogerlo con seguro a todo riesgo, porque nunca se sabe. Además, cuantos más días, a la larga suele ser más barato. En Italia, respecto a España, nos pareció super cara la gasolina, incluso, uno de los días, casi nos quedamos tiradas porque en Migliori no encontrábamos ninguna gasolinera. Gracias a Google Map y a la gente de allí pudimos conseguir una gasolinera en condiciones.
Queríamos quedarnos en Vietro sul Mare, pero era más barato Salerno y, la verdad, mereció mucho la pena quedarnos allí, fue un pueblo con mucho encanto. También, tiene lugares muy baratos para comer, el mar a nada y calles repletas de pinturas, pero ya les contaremos mucho más adelante en otro post sobre Salerno. Fuimos viendo cada pueblito, la verdad es que la carretera era lo peor. A pesar de tener los mejores éxitos gracias al pendrive que nos grabó Ruth (algunas no me gustaban tanto pero mejor eso a nada) había momentos en el que parecía que íbamos a morir.
A cada instante, lo siento italianos, pero es verdad, teníamos la sensación de que un coche nos mataría de frente. Aparte de no haber espacio y miles de curvas estrechas sin ninguna visibilidad. Luego para aparcar era horrible. Nunca había aparcamientos gratuitos. Los que estaban cercanos a los lugares importantes costaban un riñón y medio. Así que teníamos que aparcar más lejos. Y claro, con suerte de encontrar aparcamientos, ya que todos carísimos. Pero merecía la pena completamente el esfuerzo de caminar.
Los pueblos que componen la Costa Amalfitana son: Amalfi, Positano, Ravello, Furore, Atrani, Minori, Maiori, Conca dei Marini, Praiano, Cetara, Vietri sul Mare, Scala, Tramonti, Agerola, Erchie, Salerno, Raito y Pogerola. Como ven, son muchos pueblos a los que se puede acceder en barco, en moto, coche o mediante guaguas (autobuses) que salen de Salerno y Sorrento. Aunque viendo como iban las guaguas y las colas que generaban, sinceramente, no lo recomendamos tanto. Además, suelen limitar muchos los tiempos y siempre hay cosas que te gustan más que aquel que hace los itinerarios de las guaguas. Así que mejor ir por vuestra cuenta y tomarse las pausas que consideren.
Depende del tiempo que quieran tomarse para visitar los pueblos, realmente, si es verano, se pueden hacer en dos días. Aunque el turismo y los atascos también pueden hacer que este tiempo varíe. Respecto a la comida, la verdad es que muchas veces la llevamos de casa, comprando en supermercados para que nos saliera más barato. De todas formas, les dejamos diferentes posts con recomendaciones de dónde comer:
Respecto a la estancia, les recomendamos cogerla con mucha antelación. Ya que es un destino muy demandado, sobre todo en verano. En esta época suben los precios horriblemente. Un dato curioso, es que destino de verano de los más famosos, las Kardashian fueron este año y también, iconos italianos como Chiara Ferragni y Fedez se han pasado por allí. Además, una de mis marcas favoritas de ropa italiana Antica Sartoria a parte de inspirar sus looks en estos paisajes, también, inunda gran parte de lso pueblos, teniendo diversas tiendas que te darán el mejor look estival. Así que ya saben, reserven con Booking o Aribnb con la mayor antelación posible.
Cada pueblo tiene su encanto, a veces pasábamos por un pueblo diferente y casi no nos dábamos cuenta. Predomina el colorido y el olor a mar. Con mucho verde y flores en cada pueblo. Artesanías y azulejos en cada uno de ellos, como esencia del lugar. El olor a limones frescos, plantados como parras, nunca lo había visto, ese tipo de cultivo. Cada uno de estos pueblos tenía algo que lo hacía único. Por eso recomendamos ir en verano y visitarlos todos. Así que esperamos que les gustara este post. Que sigan viajando con nosotros, que compartan con sus amigos nuestras experiencias y que siegan disfrutando con nosotros. Ya saben, sigan viajando, viviendo y siendo felices. Infinitamente agradecida, gracias mis queridos viajeros.