Primera parte: aventuras por Malta

Los mejores viajes son los que surgen del improviso. Una tarde más de enero, cansadas de estudiar. Ya no podíamos concentrarnos más y las ofertas de Ryanair eran muy tentadoras. Queríamos un Erasmus completo en viajes. La verdad es que habíamos tenido la suerte de recorrer gran parte de Italia, el mes de febrero lo teníamos pleno de viajes. Pero nos faltaba algo en nuestro itinerario. Y así surgió la idea de Malta. Al improviso. ¿Qué podía salir mal? Playa, sol, el mar y la fiesta estaban aseguradas. No nos costó mucho decidirnos, ya el precio de por si ayudó a que nuestra elección fuera irnos a principios de Semana Santa (Pascuas) a Malta.

He decidido dividir este viaje en dos etapas, ya que el viaje se puede englobar en una primera parte muy costera, en busca del calor veraniego que aún estaba por llegar a Roma. Y la segunda parte, una más cultural, llena de turismo, conociendo mucho más allá la isla. Que no solo ofrece playa y fiesta, como muchos piensan. Es una ciudad llena de cultura, historia y dolor pasado que hacen de hoy una identidad tan peculiar y diversa a otros países que fuimos.

Conociendo un poco mejor Malta

De las primeras cosas que me sorprendieron, ya que conocía muy poco de la isla, era la capacidad de mucha gente de hablar el italiano. Pronto nos contaron la gran dependencia de la isla, a pesar de ser independiente, de otros países, ya que fue colonia de países como Italia (de ahí la dependencia de las exportaciones de productos sicilianos a la isla), Gran Bretaña, Francia, etc. Se puede apreciar esta diversidad cultural en los rasgos de su población. Otra característica, es la cantidad de guerras que vivieron y lo afectadas que se vio la isla a pesar de no tener que ver nada en mucha de ellas. Es por eso, como nos comentaba nuestro guía, que muchas casas son de ese color amarillento-marrón como la arena para que desde el aire se confundieran las casas y así no poder ser bombardeadas.

También, debemos recordar las isla que pertenecen a Malta: Comino, Cominotto, Delmarva, Filfla, Gozo, Halfa, Islas de San Pablo, Manoel, Tac-Cawl, Ta`Fraben. Además, de otras rocas, que no llegan al tamaño de las islas pero que son reconocidas por sus calas y su azul celeste como son la Roca Barbaganni, la Roca Fessej, la Roca Fungus, la Roca Għallis, las Rocas de la (de la Gran y de la Pequeña) Laguna Azul, la Roca Sala y la Roca Xrob l-Għaġin.

Independencia

Típica arquitectura construida en los últimos años en Malta.

Aunque Malta se independizó el 21 de septiembre de 1964, los británicos permanecieron en su territorio y mantuvieron un control total de los puertos, aeropuertos, correos y emisoras de radio y televisión. Según la Constitución de 1964, la reina Isabel II del Reino Unido seguía siendo la soberana de Malta, y un gobernador general ejercía la autoridad ejecutiva en su nombre. El 13 de diciembre de 1974, sin embargo, Malta se convirtió en una república dentro de la Mancomunidad de Naciones (Commonwealth), con el presidente como jefe de estado.

El 31 de marzo de 1979 se hizo efectiva la salida de los británicos, pues su gobierno rehusó pagar la tasa exigida por el gobierno maltés para permitir su estadía^{[cita requerida]}. En ese momento Malta se encontró sin bases militares extranjeras por primera vez en su historia. Este acontecimiento se celebra como el Día de la Libertad.

Malta se adhirió a la Unión Europea el 1 de mayo de 2004 y accedió a la zona euro el 1 de enero de 2008. (fuentes de Wikipedia)

¿Qué ver?

Ahora toca que ver. Como ya habíamos tenido una experiencia un poco mala con Civitatis en Berlín, preferimos contratar las visitas guiadas por otra página. En Free TOUR puede conseguir tours gratuitos en casi todos los países, tanto en tu lengua como en la del país. En general, puedes conseguir las visitas en inglés, porque no siempre hay en español. Nuestro guía fue adorable, nos contó todo al detalle, y nos sorprendió la cantidad de historia que tenía Malta y la de guerras por las que pasó.

También, nos mostró muchas curiosidades e historias externas que se habían desarrollado en la isla actualmente. Una de ellas es la cantidad de personas, siendo uno de los territorios con mayor densidad de población en proporción al territorio que es. Este tour lo hicimos en la Valeta y fue toda una sorpresa. Recorrimos sus calles, su historia, conocimos a su gente y sus costumbres y, también, entendimos un poco mejor la personalidad de la población de malta.

Desde allí decimos aprovechara para ver las tres ciudades Cospicua, Senglea y Vittoriosa. Antes, vimos desde el mirador en Valeta desde el cual se podía ver todo el puerto y la parte que parecía Desembarco del Rey de Juego de Tronos. Estas tres ciudades las pueden ver en nada, son preciosas y se come muy bien. A nosotras nos cogió de lleno una procesión de Semana Santa. Era tan diferente a las de Málaga o Sevilla.

En ella parecía participar toda la población joven y adulta de la isla. No se acaba la de innumerables personas vestidas. No terminábamos de entenderla, ya que parecía mezclar muchas culturas y momentos. Y nuestra experta en procesiones, Clara Pérez, malagueña, también estaba aturdida por todas las vestimentas y personajes bíblicos que aparecían. Todo un misterio. Aquí les dejamos una página en la que podrán ver más cosas para hacer y ver tanto en estas ciudades como en Malta: Viajar Malta.

Aún queda mucho por conocer de Malta, así que ya saben, estén atentos a nuestras redes sociales que pronto publicaremos la segunda parte.