“Como la fragancia de la lavanda, el amor tampoco se puede ocultar”. – Sudipta Das. Y así empezamos este post sobre uno de los pueblos más bonitos que he recorrido en mi vida. Campos inmensos de lavanda que te enamoran hace que parezca que estamos sumergidos en la Provenza, pero no queridos viajeros, no hace falta irse tan lejos. Tan solo hay que ir a Brihuega, un pequeño pueblo de Castilla la Mancha que les encantará.
Para comenzar, Brihuega es un pequeño municipio de Guadalajara, siendo a su vez un enclave muy importante para aquellos amantes de la historia. Desde el rey Al-Mamún de la taifa de Toledo hasta Alfonso VI, serían algunos de los apasionados de este hermoso lugar. ¿De dónde viene su nombre? Pues su origen están en un poblado celtibérico llamado Brioca y un dato curioso también es que se dieron en este enclave diversos acontecimientos bélicos muy importantes, tales como en 1710 el asalto de las tropas de Felipe V, durante la Guerra de Sucesión. O incluso, durante la Guerra Civil, se convirtió en una parte fundamental para la victoria del Ejército Popular Republicano en la batalla de Guadalajara.
Uno de los principales, y que se aleja mucho de este pasado, son sus inmensos campos de lavanda que se pueden visitar sobre todo en verano. Y como ya les adelantábamos, no hace falta irse a Provenza, eso sí, mejor ir en coche, pero se puede ir también en autobús con la línea que conecta Brihuega con Guadalajara y Madrid. Lo cierto es que se hacen también excursiones al campo, pero lo mejor es ir al pueblo primero, y luego poder perderse en sus campos y olvidarse de todo mientras el dulce aroma de la lavanda se cuela en ustedes.
El mejor mes sin duda para visitar la villa de Alcarria (donde se ubican los campos de lavanda) es julio. Pero además de esto, el casco histórico de la ciudad guarda muchos secretos por descubrir. Desde galerías subterráneas que servían como refugios y que algunos se conservan, un jardín sacado de cuento de hadas, su muralla, etc.
Esta villa que fue musulmana y, posteriormente, castellana, está repleta por numerosas fuentes y manantiales. Para acceder a ellas, les invitamos a pasar por la Puerta de la Cadena. De este modo, accederán gracias a ella, que correspondía a la antigua muralla, al casco histórico que conserva ese pasado medieval de Brihuega.
Empecemos por el Castillo de la Peña Bermeja que es uno de los primeros monumentos tras la muralla que observaremos. Aunque es un baluarte defensivo, no se ubica como es lo habitual en las cimas para tener una mejor vista del enemigo y dificultar su acceso. ¿Por qué? En el siglo XI, Brihuega se ubicaba cerca a las orillas del río, de ahí que estuviera en esta zona, pero posteriormente el pueblo fue subiendo hasta constituir lo que se considera “El Barrio nuevo”.
Una cosa que me impresionó del castillo, además de su conservación y que por Canarias no estamos tan habituados a este tipo de edificaciones, fue que el antiguo cementerio se conservara. Eso, y las vistas que tienen desde la iglesia colindante de Nuestra Señora de la Peña del siglo XIII. ¿De dónde el nombre del castillo? “De una gran piedra rojiza encastradas en los sillares de su fachada”, explican en el artículo de la Guía Repsol.
«Representa la sangre derramada en el asesinato de una hermosa lugareña a manos del guardián del castillo en tiempos del dominio árabe. Cuenta la historia que este hombre, al que ella desconocía, quiso mantener relaciones con ella en el río, y cuando se negó, él la mató con su espada. La piedra sobre la que quedó tendido su cuerpo se tiñó de rojo. Los briocenses decidieron colocarla en un lugar bien visible como muestra de su dolor y consternación.”
Guía Repsol
Un lugar que nos pareció super curioso fue la Oficina de Turismo. Se preguntarán, ¿qué puede tener de diferente esta oficina? Pues justo cuando vas de camino a ella, te encuentras con la Fuente de los Doce Caños y, además, con los antiguos lavaderos. Como ya comentábamos estamos ante una zona con una riqueza en manantiales y aguas subterráneas, como es en la zona de El jardín de la Alcarria.
Y aquí llega el dato curioso. Por lo visto, había una leyenda o superstición que decía que si bebías de los 12 caños encontrarías novio. Hay una historia muy parecida en la Gomera en los Chorros de Epina. A través de los siete chorros de madera de brezo sale agua limpia y fresca, como los de Brihuega, sin embargo, con estos chorros no consigues novio, sino que te revela tu futuro amoroso. Aunque yo siempre había escuchado que cada chorro representaba una cosa: salud, dinero, amor, etc. Que es otras de las leyendas sobre los chorros de la Gomera.
Quizás uno de sus atractivos más inesperados o desconocidos de la meca de la lavanda son las cuevas árabes que están por la carnicería de los ‘Hermanos Gutiérrez’. Cuando llegamos al lugar no entendíamos nada. Para nosotros era un lugar inesperado que no sabíamos que existía, pero que nos encantó ¿Y lo mejor? Es super barato, solo 2 euros. Como curiosidad: durante la guerra se usaban como búnker. Y dentro encontrarán jarrones y antigüedades que les ayudarán a viajar en el tiempo.
Aproximadamente 600 metros de grutas y caminos subterráneos que están a disposición de todos aquellos que se quieran aventurar. He de admitir que me pareció fascinante la experiencia, pero hay un momento en el que tuve miedo de perderme. Pero no porque no estuviera bien indicado para salir, sino, más bien porque no sabía bien reconocer las diferencias entre un pasadizo u otro.
Aquí les dejamos una lista de sitios que visitar que también creemos que les encantarán:
Lo que está claro es que en Brihuegas hay muchas sorpresas más allá del campo de Lavanda. Es un pueblo lleno de historia y de cosas que hacer, y ya les digo, sus postres son una maravilla. Así que ya saben, el próximo verano ya tienen plan. Y recuerden, nunca dejen de viajar, descubrir y conocer.
Ven tambien en invierno, no te defraudaremos
Ay Pilar, sin duda intentaremos sacar un día para ir, porque se come de lujo y nos pareció súper bonito el lugar!! Espero tus recomendaciones